Iulene Olabarria es historia del Ibaeta Basket y así se desprende de las palabras que le dedicaron ayer tanto Carmen como Azu. Además de su calidad en la cancha, la donostiarra es, por su sencillez y cercanía, una persona muy querida por sus compañeras y también por las rivales. La presidenta comenzó destacando los momentos deportivos conseguidos por el club de la mano de Iulene: «Aquella canasta para subir al equipo a Liga Femenina 2 es nuestro primer gran hito, y en la fase de ascenso a Liga Dia en Cáceres no olvidamos los siete triples que metió contra el Ferrol. Y ya en la Liga Dia, la primera victoria vino de su mano. Este club ha ido creciendo de su mano durante las últimas 16 temporadas».
Carmen Muguruza destacó la «suerte» de seguir contanco con Iulene, ahora fuera de las canchas: «Hablar de Onintza (que anunció su retirada hace dos meses) y Iulene es hablar de dos grandes amigas. Llegé al club y Iulene ya estaba, y por suerte ahora va a seguir conmigo. Queremos que siga vinculado a él todo el tiempo que ella quiera. No queremos prescindir de ella, hará tareas de gestión y desde el punto de vista técnico. Nos va a servir sobre todo para que los valores del Ibaeta Basket se mantengan vivos con nosotros. Nos deja una enorme tarea por delante, conseguir que este club siga teniendo jugadoras tan bien formadas y que representen tan bien los valores del deporte como ella. Siempre será nuestra capi».
Azu Muguruza y Iulene han compartido 16 años en el equipo. La entrenadora le agradeció su actitud y entrega durantetodo este tiempo: «Ha tenido un crecimiento brutal, ella siempre ha querido quedarse con nosotras y hacer de este club lo que ahora es. Gracias por su profesionalidad, desde los 17 años ha sido una profesional como la copa de un pino, su madurez fue increíble desde el principio. Gracias por su colaboración, con jugadoras que vienen de fuera, jóvenes que vienen con nervios y ella siempre les ha tendido la mano y les ha ayudado en miles de cosas. Para mí como entrenadora ha sido una ayuda increíble. Hemos hecho un camino desde ser un equipo muy modesto a llegar a Liga Dia. En todo ese camino imaginad todo lo que hemos vivido y aprendido juntas. Cuando hay piedras en el camino y las superas, como relación es muy bonito. Este camino ya no se va a poder volver a repetir. Ahora empezamos otro camino, estoy encantada de que siga como compañera de trabajo y hagamos que el club siga creciendo».
Azu reconoce que las pérdidas de Onintza y Iulene son importantes, aunque no será hasta el comienzo de la pretemporada cuando realmente se notará su ausencia: «Hasta que no empecemos la temporada y en el día a día notes esa falta en complicidad, no lo sabré. Es la tristeza de dos jugadoras que llevan muchísimo tiempo con todo lo que han aportado. No voy a ser consciente hasta el día a día, hay cosas que echaré de menos en el momento».